GABI, CELULA INFORME

Las células informes son unidades fundamentales de la vida, con una estructura que se adapta siempre para desarrollar cualquier función. Mi abuela diría personas que igual “fríen una camisa que planchan un huevo” o que valen para todo, son plurifuncionales o multifuncionales. En la sociedad faltan personas así.
Antes, los Magos traían pocos juguetes con un fin concreto: eran concretos los que solo servían para un determinado juego. Un esquiador con cuerda solo servía para andar sobre sus esquís moviendo los brazos. Sin embargo, había chiches que se podían usar para todo. Un palo y una cuerda eran informes, se usaban para con imaginación, hacer un caballo, un saltador, o unas firmes esposas con las que atar a tu hermano pequeño. Esos elementos informes eran los mejores y más útiles para nuestra imaginación. Un obsequio de este tipo era equivalente a recibir muchos regalos.
Gabi es la persona al que dentro de nuestro Ayuntamiento se le puede encomendar cualquier trabajo con la seguridad de que lo sabrá hacer y podrá cumplir con el objetivo. Los cantaores flamencos dirían de él que es un artista que “toca todos los palos”. Tanto ordena los interiores de los colegios como está atento a sus aledaños, siempre con el cuidado extremo de los niños. Los chavales a veces le piden: “Gabi llámame a y media que a menos cuarto viene mi padre a buscarme”. Gabi lo hace.
A Gabi se le puede interpolar perfectamente en el texto de 1530 de Baltasar Castiglione, “El Cortesano”, y en la descripción que hace sobre los atributos​ del polímata, el hombre versátil, de actitud individual aparentemente despreocupada, fresco, no redicho, que habla bien, canta, o recita poesía, con porte atlético y conociendo la vida. Todo ejecutado sin jactancia porque los muchos talentos del “homo universalis” renacentista deben parecer realizados sin esfuerzo, de forma desenfadada, casi sin pensar. Son los hombres enciclopédicos, protagonistas de Diderot o D’Alembert.
La capacidad de adaptación de este joven padre de periodista debe hacer recapacitar a una sociedad a la que rápidamente se la pide que “te quiten el muerto” para escaquearte del mandato. Gabi es muy querido en nuestro municipio, tiene voluntad de servicio y eso no se paga suficientemente.