Señores lectores, seguro que prácticamente todos los que leen estas líneas se han pegado una ‘rajada’ de algún patinete eléctrico que casi les atropella por una acera o al que han estado a punto de atropellar en cualquier calzada por ir deficientemente señalizado.
A principio de 2024 la DGT ha promulgado una normativa de movilidad urbana para patinetes, por la cual, a partir del 22 de enero de 2024, todos los patinetes nuevos deberán tener un certificado de garantía de seguridad para poder circular por las calles, salvo aquellos adquiridos antes del 22 de enero, que podrán seguir desplazándose sin problemas hasta el 22 de enero de 2027, previa presentación de la ficha técnica del vehículo en una jefatura de tráfico.
En el trasfondo de la nueva normativa subyace un viaje hacia una movilidad más segura: recomendación de casco (depende de cada ayuntamiento el tener que usarlo de manera obligatoria u opcional); velocidad máxima de 25 km/h; prohibición de circular por aceras y zonas peatonales; ser mayor de 16 años o contar con autorización parental; luces delanteras y traseras obligatorias; y contar con un timbre, entre otras.
A pesar de todo lo anterior, ¿alguien ha concedido una bula a estos vehículos? Lo digo porque son permanentes los incumplimientos de la norma: por Arroyo, por ejemplo, son constantes los patinetes por las aceras; ayer mismo una niña de 6 años iba al mando de uno de gama alta circulando a una velocidad considerable por la acera, y su padre, orgulloso, elogiaba la capacidad de la niña. Muchos van sin luces y apenas se ve policía sancionando estas conductas, que siguen siendo muy, muy habituales. ¡Ah!, perdón, es que hay que perseguir a los automóviles de 4 ruedas por si estacionan en un lugar inadecuado para recoger a un niño o para hacer una pequeña compra.
Y no me quiero olvidar de los peatones, responsables de gran cantidad de accidentes y que con total impunidad se saltan semáforos, cruzan por lugares indebidos y cometen infracciones muy graves que han causado serios trastornos a conductores.
Autoridades municipales: por favor, hagan cumplir la normativa de monopatines eléctricos y sancionen con rotundidad; multen a los peatones intrépidos que no respetan la normativa del tráfico y dejen un poco tranquilos a los sobre-castigados conductores de coches y motos que, aunque ustedes no lo crean, son los más disciplinados en el cumplimiento de la regulación vial.
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