Con el objetivo de fomentar una correcta separación de la basura en el hogar con la que mejorar el reciclaje de la fracción de residuos orgánicos. El Ayuntamiento de Arroyo de la Encomienda iniciará el próximo lunes, 25 de noviembre, el reparto de más de 10.000 cubos marrones.
La Concejalía de Infraestructuras y Servicios ha establecido un calendario de distribución y unos puntos de entrega con los que pretende llegar a todos los núcleos del municipio, facilitando así la recogida por parte de los vecinos. El reparto se llevará a cabo tanto a las puertas de los cinco colegios, como en las principales plazas y espacios públicos.
El lunes 25 arranca en el CEIP Margarita Salas en horario de 13.30 a 15.30, el mismo que se repetirá el martes en el Kantic@, el miércoles en el Atenea, el jueves en el Raimundo de Blas y el viernes en el Elvira Lindo.
El domingo 1 de diciembre, entre las 17.00 y las 19.00 horas, se establecerá un punto de recogida en La Flecha, en la Plaza de España. El miércoles día 4, en el mismo horario, se repartirán en Las Lomas (en la confluencia de las calles Severo Ochoa y Torres Quevedo) y el jueves 12 será el turno de La Vega (avenida de José Luis Lasa, en el ‘Parque del Tubo’), para acabar el domingo 15 de diciembre en la Plaza Mayor de Arroyo (en el Centro Etnográfico).
Estos mini contenedores están ideados para que el ciudadano pueda tenerlos en la encimera de la cocina durante las tareas de preparación de la comida, que es cuando más residuos orgánicos se generan en el hogar.
El contenedor marrón es el indicado para todos los restos de comida, es decir, pieles y restos de frutas, verduras y hortalizas, panes y bollería, frutos secos y sus cáscaras, carne, pescado y marisco, tanto crudo como cocinado. También debe ir al marrón el resto de residuos orgánicos, como posos de café e infusiones, con las bolsitas de papel, servilletas y papel de cocina usados, palillos y tapones de corcho, y hojas, flores marchitas y restos de jardinería.
El contenedor gris es al que debe ir el resto de residuos que no sean los orgánicos, los envases, el papel y cartón o el vidrio. En él caben desde colillas y aceite, hasta restos higiénico-sanitarios como pañales, toallitas, compresas o guantes de goma.