El Club Arroyo Alligators Touch, presidido y dirigido por Mark Roberts, fue el anfitrión de la primera jornada de Segunda División de Touch, disputado en los campos de rugby de Sotoverde. El club Getxo demostró una importante superioridad e hizo valer su experiencia, ya que es uno de los equipos que descendió de categoría la anterior temporada y que, por tanto, aspira esta nueva campaña a regresar a la máxima competición.
El cuadro arroyano participó con su equipo emerging, formado por jugadores y jugadoras recién llegados a este deporte y con menos tiempo competitivo, y resultó una interesante primera toma de contacto, ya que se plantó cara a rivales más veteranos, lo que hace prever una buena progresión de cara al futuro.
En total se disputaron nueve partidos, en los que Getxo se impuso en los tres en los que jugó, ante el Salvador, Pakaru y Alligators, mientras que Txingudi, Titanes y El Salvador ganaron dos de los tres encuentros en los que participaron -si bien hay que aclarar que, en el caso del conjunto vasco, jugaban sin chicas, cuando esta modalidad es mixta y se exige que haya tres féminas sobre el terreno de juego durante todos los encuentros-.
Por tanto, de cara a la segunda jornada, que tendrá lugar en Madrid el 26 de noviembre, Getxo y Pakaru parten con ventaja respecto a Arroyo Alligators Emerging, a Caldes (Barcelona) y Mallorca Rebels (Islas Baleares), que no pudieron viajar hasta tierras vallisoletanas.
Antes, el 12 de noviembre, el equipo de Liga Nacional de Arroyo Alligators Touch debutará en la máxima categoría del touch, también en Madrid, lo que se convierte en un paso más en el desarrollo de un club que apenas cuenta con un año de vida.