Recientemente el tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo ha dado la razón a un grupo de jubiladas Suizas que interpusieron una demanda contra el gobierno Suizo por incumplimiento de sus propios objetivos de reducción de emisiones de efecto invernadero.
El tribunal entiende que el gobierno Suizo ha incumplido varios artículos del Convenio Europeo de derechos humanos por que su falta de acción por el clima pone en riesgo de morir a las personas mayores, por ejemplo durante una ola de calor.
Si analizamos la noticia vemos dos cosas muy interesantes: La primera es que un grupo de jubiladas, 2000 en concreto que forman una asociación y con una media de edad superior a los 73 años han sido capaces de pleitear durante años y llevar la causa a la máxima instancia Europea de derechos humanos.
No hace falta ser joven para luchar por el clima, la defensa del medio ambiente no tiene edad.
La segunda no es menos importante y es que se condena la inacción de la administración, el tribunal detalla que el gobierno Suizo no ha cumplido los objetivos de reducción de emisiones y por tanto no había planificado o lo había hecho mal.
Esto es un paso importante en nuestra actual sociedad pues va a obligar a las administraciones en un futuro a hacer, a planificar, a hacerse responsables del cumplimiento de las normas que ella misma dicta.
La inacción, el no hacer será un elemento por el que se evalúe a las administraciones en un futuro y la sociedad les juzgará para que sean ágiles y sean capaces de desarrollar e implementar las medidas necesarias para el bienestar de sus ciudadanos.
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