El plan de eficiencia energética ‘Arroyo Ahorra’ opta por el suministro de energía a través de placas fotovoltaicas. Para ello el Ayuntamiento está utilizando las infraestructuras existentes, las cubiertas de los edificios públicos, para instalar paneles fotovoltaicos que favorezcan el autoconsumo de las instalaciones municipales. «De momento hemos instalado 94 módulos en la Casa de Cultura, la sede de la Policía Local y en el Campo de Golf, y ya está en marcha la colocación de otros 66 módulos en el tejado del Multiusos de La Vega (36) y en el Parque de Bomberos (30)», explica Santiago Gay, coordinador de eficiencia energética del Ayuntamiento. La energía que se genera cubre el total del consumo del edificio de la Policía Local y además sirve para cargar los vehículos eléctricos. La inversión realizada, para colocar los 160 módulos en esos cinco inmuebles, asciende a algo más 60.000 euros. El Hogar del Jubilado, el ayuntamiento y el Centro Etnográfico serán los próximos edificios donde se colocarán módulos fotovoltaicos.
Información en tiempo real
Los vecinos pueden conocer la energía que se va generando en cada edificio a través de un monitor colocado en la entrada de la Casa de Cultura, que refleja en tiempo real el consumo de los distintos edificios municipales y lo que supone para el medioambiente. Son datos proporcionados gracias a la tecnología de una empresa local, Energybird, que además informa sobre las emisiones de CO2 que se han evitado y su equivalencia en el número de árboles plantados y en los kilómetros recorridos por un vehículo.
Las placas colocadas en la casa de Cultura, por ejemplo, han evitado desde su implantación en el mes de abril que se emitan 17 toneladas de CO2 a la atmósfera, es decir, lo que emite un vehículo recorriendo 70.000 kilómetros o lo que absorben 705 árboles.
100 kW en los colegios
Pero el proyecto municipal para generar energía limpia y reducir la dependencia de fuentes fósiles mediante la implantación de un sistema energético renovable y sostenible quiere ir mucho más lejos. Hasta ahora el Ayuntamiento ha realizado instalaciones de hasta 17 kW porque se adaptaban a las características de los edificios y se amortizan en muy poco tiempo, pero la idea es hacer instalaciones de 100 kW en los cinco centros educativos. «Los colegios disponen de una gran superficie y mucha inclinación, por lo que se pueden hacer instalaciones coplanares, pegadas al tejado, que aprovechan mejor la luz solar. El Margarita Salas, además, está orientado al suroeste, lo que hace que se den las condiciones óptimas para generar una gran cantidad de energía que servirá no solo para autoabastecerse, sino que tendremos excedentes», explica Gay.
Estos excedentes podrán exportarse a otras zonas, por lo que los paneles fotovoltaicos de los centros educativos servirán para suministrar energía también a las farolas de las calles colindantes y a los edificios públicos cercanos. El objetivo, en todo caso, es conseguir en un futuro próximo un municipio sostenible, eficiente y libre de emisiones C02.
